Cuando es 2 de enero  y acabas de hacer una lista con todas tus metas y propósitos no parece tan mala idea subir el cerro colorado, ya que en mi lista estaba hacer ejercicio, pero la verdad es que si es mala idea después de haber comido mucho el 31 y el recalentado del 1ro. Subir el cerro se puso de moda el año pasado, todo el mundo empezó a subir sus fotos a Facebook y yo quería tener la mía por eso dije si cuando mi padre me invito a ir con él y subir el cerro.

El cerro colorado es considerado un emblema de la ciudad, antiguamente se le conocía como el cerro de las dos  tortugas por su forma tan característica.

En los 90’s muchas personas llegaron a  vivir a Tijuana y muchas de ellas llegaron a vivir al cerro colorado por no tener un terreno propio donde vivir, de esta manera se empezó a poblar el cerrito. Desafortunadamente algunas viviendas que se encuentran a mayor altura no cuenta con los recursos necesarios.

El cerro se puede subir desde cualquier punto de la cuidad. Existen dos puntos populares para subir uno que es desde el Capistrano y otro desde el Mariano Matamoros

El cerro tiene una altura de 550 metros y se puede ver casi cualquier punto de la ciudad, eso hace que subirlo sea algo que valga la pena.

Mis recomendaciones si tú quieres subirlo son las siguientes: